Un campesino iba caminando con su hijo. El niño le estaba narrando algo a su padre, pero a la vez le decía mentiras. El campesino se percató de que su hijo lo estaba engañando. Entonces dijo:
— Ahora, hijito, nos estamos acercando a un puente. No es un puente ordinario, es mágico: se derrumba bajo aquellos que dicen mentiras.
El hijo se asustó y le confesó a su padre haberlo engañado.
El campesino y su niño entraron al puente, y de pronto se escuchó un tremendo ruido y el puente se cayó.
— Bueno, te engañé -aceptó el campesino cuando salieron del agua a las orillas-. Los puentes mágicos no existen.
sigo sin entender...como los padres quieren que los niños no mientan si ellos mienten?....k.c.c
ResponderEliminarEs dificil ocultar la verdad, tarde o temprano sale a la luz. El papel educador del padre es inculcar valores, enseñar el camino de lo correcto a sabiendas que tiene errores como todo ser humano, porque estamos conscientes que no existe hombre o mujer perfectos; solo a seres perfectibles, es decir, se busca ser mejor persona en todos los sentidos. SBG
ResponderEliminar